En el corazón de la Fiesta de los Gabarreros de El Espinar, un momento de profunda emotividad y tradición se despliega cuando los escolares del Colegio Arcipreste de Hita rinden homenaje a los gabarreros fallecidos. Este acto, cargado de significado, se convierte en un puente entre el pasado y el presente, asegurando que la memoria de estos hombres, pilares de la historia local, perdure en el tiempo.

El escenario de este tributo es la emblemática escultura de los gabarreros, «GRANDEZA», un monumento que se erige como símbolo de reconocimiento a su arduo trabajo y dedicación a los oficios del monte. Allí, los niños, con respeto y solemnidad, participan en un acto que busca recordar y honrar a aquellos que dedicaron su vida a las labores forestales, contribuyendo de manera invaluable al patrimonio cultural de El Espinar.

Este homenaje no es solo un acto de memoria, sino también una valiosa lección para las nuevas generaciones. Al involucrar a los escolares, se fomenta el conocimiento y la valoración de las tradiciones locales, asegurando que el legado de los gabarreros siga vivo en el corazón de la comunidad.

Dentro del marco de la Fiesta de los Gabarreros, declarada de interés turístico regional, este homenaje adquiere una relevancia especial, subrayando la importancia de preservar y difundir las costumbres y oficios que han dado forma a la identidad de El Espinar.


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